Aquel cielo estrellado era más bonito que el que había visto en las películas. Un buen plano no siempre mejora la visión parcial a la que nos acostumbra la realidad. Fue mágico desde el principio, porque no hubo "porqués", nadie se atrevió a discutir que aquel astro incandescente era Venus.
Soplaba esa brisa del final del verano, disfrutábamos del último aroma a sol, descanso y mar. Y soñamos ansiosos con vernos reflejados en otros espejos. Quizá la luna no tuviera suficiente luz aquella noche.
No medimos las palabras, porque no hacía falta, también sabían hablar los silencios. Como tantas otras veces a partir de entonces.
Bajo la misma luna, nos delatamos con besos otras noches... no hicieron falta estrellas porque les habíamos robado su luz. Y desde entonces, busco aquel olor en todos los cielos que embriagó por completo la primera vez, el primer puerto, la primera estación.
Entiéndeme, hoy sólo pienso en ti. Quizá sea el exceso de películas de amor.
dando un garbeo por tu blog
ResponderEliminarsaludos desde Reus
Comienzo a pensar que este tipo de psicotrópicos no son nada buenos... cruzaremos los dedos para que la primavera nos traiga nuevas escenas de Casablanca.
ResponderEliminarUn abrazo
Es extremadamente bello...
ResponderEliminar...traigo
ResponderEliminarsangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
TE SIGO TU BLOG
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
AFECTUOSAMENTE
SIEMPRE NOS QUEDARÁ CASABLANCA
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE LOVE STORY, CABALLO, LA CONQUISTA DE AMERICA CRISOL.
José
ramón...